jueves, 12 de octubre de 2017

LLuvia



Protagonista te hice
a ti… sí, a ti,
          incolora línea,
la mitad de mi inspiración
          fue para ti.
Desde siempre, desde que
          en esta vida siento y
sufro,
         ver caer el agua furiosa,
dando latigazos sobre el suelo
          fue mi delirio.
Quince tormentas,
quince lamentos,
quince empapados poemas
           llevaban el signo majestuoso
que tu sabes imprimir.
Marcaste
           con cicatrices
serpenteantes
cabezos indómitos:
arrollaste bajo color
amarillento moles inverosímiles;
apaciguaste –sensata-
          la sed del fiel
campesino que no
          necesitó
sacar los santos a
          la calle.
¿Qué inspirado tiralíneas
          se encargó
de trazarte?
¿Qué envidiable poder
          confió
en tu bondad?
En una tarde
          olvidada,
obsesionada en tu idea,
          te llevaste
hasta confines inhóspitos
una parte
           de mi vida.
Cada lágrima que
llega al suelo
            me parece
desgarrada letra
                          huyendo
de sutil cautiverio.
¡Salten rayos vengadores!
¡Lluevan grafías oprimidas!
           Mueran
ahogadas en verde
           cieno
antes que permanecer
            esclavas
de níveo papel
inmóvil.

8 comentarios:

  1. Jooodeeer, Pepe, pedazo de poema. Mi admiración con un abrazo

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  2. Me ha encantado leerte Arruillo, la imagen es perfecta para tan lindo poema.

    Un abrazo.

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  3. No fue un tiralíneas; fue tu alma de Poeta.

    Un abrazo grande.

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  4. Me resulta un poema de muy buen ritmo, amigo. Siempre un placer leerte.

    Abrazos

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    Respuestas
    1. Muchas gracias, tocayo. Siempre es un placer verte por aqui. Un abrazo

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