Fotografía tomada de la red
A veces el
amor ciega tanto que se nos olvida lo más esencial: el diálogo. En una ciudad
donde es tan fácil perderse como encontrarse, Graciela y Leo se esfuerzan por
ser ellos mismos y tratan a la vez de compaginarse el uno con el otro, pero la
palabra justa y necesaria, en el momento adecuado, no acaba de surgir de sus
gargantas, así que pasan los días, parece apagarse la vela, pero ahí están
ellos, son jóvenes y con mucha vida por delante. De esto trata La conversación,
un relato que pueden encontrar en el libro Una parada obligatoria.
Es fundamental el diálogo, y hoy en día se carece bastante de él.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Besos.
Gracias, María, por la visita. La palabra es un don fundamental ¿Qué seríamos sin ella? Besos
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