martes, 26 de noviembre de 2013

Tortuosas ruedas


369 ¿Aún te dura la resaca, Gon? , todavía me resuenan loa ecos de la presentación, si a eso te refieres? ¿Y D. José habrá dormido bien?, ni lo sé, ni me preocupa, ¿quieres hacer el favor de saludar a Trini, María, Joâo, Aniquiladora y MJCollado y colgar tu poema de una vez..., voy,voy...

Tortuosas ruedas contemplan
la niebla a ras de suelo.
El jergón rebosa viandas
y los músculos están tensos.
¡Ay amor! Horizonte de festín carnal.
Esculturas pedregosas profanan
la piel, dislocan huesos;
el sudor cae en gruesas gotas,
recuerda al mar, las olas
nos golpean las espaldas. Mira, amor ,
libélulas creativas dibujan
un corazón con sus abdómenes.
                           Recuperamos.
Se agrietan nuestras camisas
y la sangre se agolpa en la ventana;
zorzales lánguidos que lloran,
aulagas en flor muerden la pantorrilla,
Se nos pierde la mirada
tras una alondra en su nido.
-aún nos quedan granos de besos.
                          Negruras
se desgajan, untándonos de barro.
El aire ya no alimenta,
caminar empieza a no conjugarse,
dos pájaros se aparean,
nadie los distingue.
                  Ayer te vi, deslumbrabas.
En la enésima jornada
la niebla abre sus puertas,
el rey Sol nos saluda
y dejamos correr cristalinas
miríadas de besos –orgías.
Ya estamos preparados
para el próximo viaje.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

El lunes 25


368 ¡Ofú como está D. José!, ¿cómo está, Alba?, que se sale, con eso de la presentación del libro no para, es que el jefe es mucho jefe, ya lo creo, Gon, hasta para él mismo: atando cabos y echando el resto para que todo salga bien, como debe ser, ya veremos que pasa, por cierto le dijiste a María José la hora, que si pesado, Gon ¿qué me dices de los comentarios de tus amigas Trini, Marisa, María y Vero, ¿es que estuvieron hablando mal de mí?, ¡que no, leñe!, que no es eso, más bien todo lo contrario, ya te dije que “El semáforo” iba a dar que hablar, ellas se portaron bien, pero en cambio en TR parece que te han dado un tironcito de orejas ¿eh?, Alba ¿cuándo te vas a convencer de la potestad que tiene el lector de decir aquello que le plazca?, si eso es lo que dice D. José, pero… ¿a que duele?, si no duele, al menos lo piensas, yo creo, Alba, que las críticas no son sino meros acicates para aplicarse más al cuento, otra cosa que dice D. José, ¡bueno, vale!, que pesadez con D. José, leche, pues no que parece que lo tenemos siempre sentado a nuestro lado, Gon, no te sulfures, es nuestro jefe, ¡ya!, pero ahora estamos hablando tú y yo ¿vale?, de acuerdo, Gon, te cambio el paso: en PsP parece que la cosa pinta mucho mejor ¿no crees?, hay muchas reformas y todas para bien, seguimos en la cresta de la ola, cuentan con nosotros y existe una presidente de comunidad que se mueve lo suyo, vaya que si se mueve, me alegro, Alba, ¿te alegras?, me alegro que te hayas llevado un minuto hablando de aspectos positivos de nuestro trabajo y no hayas mencionado a D. José, ¡joder, Gon!, el lenguaje, Alba, cuida el lenguaje, si es que haces hablar a las piedras, qué puñetero eres, ¡je,je!, ¿cómo llevas a Unamuno?, me está gustando, ¿y eso también…?, ¡Gon!, Alba, Alba, que viene D. José… como te iba diciendo: el lunes 25, a las 19,30h, en la Casa de las Sirenas, en la Alameda de Hércules, de Sevilla, Gon, no te olvides.

martes, 12 de noviembre de 2013

El semáforo


367 Bueno Gon, se va acercando la fecha, los nervios me comen, Alba, estoy que no vivo, el día 25 será tu día, Gon, vale, vale, tampoco te pases ¡eh!, a lo que vamos: nuestros amigo Mª José Collado, Joâo y María pasaron por aquí y como tú no estabas me dieron recuerdos, oye si te pones así, también puedo decir yo que cuando vinieron a tomar café: Vero, Trini y Marisa, tampoco estabas tú, como eres, Alba… mira, ahí llegan J. Valle y Stella, ahora los veremos, anda cuelga ya tu micro, que se nos va el tiempo…


 El semáforo se pone en verde y le da a las mujeres jóvenes diez segundos para que puedan cruzar la calle. Todas cruzan. A continuación cinco segundos para niños acompañados. Una madre se entretiene y se le agota el tiempo en mitad de la calzada; la primera moto en arrancar por poco la atropella; rugen los motores y quedan petrificadas, faldas al aire: cinco minutos de calvario. Ahora se pone rojo para los vehículos y le da tres segundos para que crucen las bicicletas: la madre sigue impasible. Los diez segundos siguientes son para ancianos o gente impedida; el niño se desespera y arranca a correr hacia la acera, la madre levanta los brazos y corre tras él. El semáforo vuelve a abrirse para los vehículos a motor. Un guardia se interpone entre la madre y el niño, y se dispone a multarla por haber atravesado la calle cuando no le correspondía. La gente forma un corro en torno a ellos, el guardia se siente presionado y decide pedir refuerzos. Mientras tanto el semáforo a lo suyo: ahora le concede veinte segundos al público en general.

martes, 5 de noviembre de 2013

Las pequeñas esencias


 366 A ver si nos aclaramos, Gon, cuando yo decía que estrenábamos poemario, me refería a que íbamos a ir poniendo poemas que nunca antes habíamos hecho público, ¿y a mí que me cuentas?, ¡ah! ¿pero tú no decías…?, ¿yo?, fue tu amiga Trini quien habló de eso, es que como las demás que estuvieron por aquí el otro día y hablaban y hablaban de un nuevo poemario, pues nada hijo, lo siento, puede que no me explicara bien, aunque a efectos prácticos es lo mismo, son nuevos poemas y ya está, ¡ojú que lío!, otra cosa, Gon, ¿sabes que Vero saca un nuevo poemario?, ¡¡cómo!!, ¿me vas a seguir liando?, que no, Gon, que hablo en serio: se llama “Las pequeñas esencias” y lo edita 2deLetras, ¿y a qué espera D. José para tener un enlace colgado en la puerta?, en ello anda, Gon, no desesperes, encima que es una lectora de nuestros bosques, ¡ya!, oye, Alba, que buena noticia que tengamos a Marisa por aquí ¿verdad?, ya lo creo, Gon, sabes que siempre me gustó mucho como escribe, ¿viste a María?, no pude verla porque…, bueno, no pasa nada, anduvo por aquí con Stella y me dieron recuerdos para ti, pues si que ha habido movimiento, Gon, hablemos de cine, hablemos, Alba, ¿qué te pareció “El bosque animado” de Cuerda, qué buena peli, Alba, ¡y qué llenazo en el cine club!, para que veas que no está todo dicho sobre el cine español, ya veo, ya veo, ¿cómo andas con las lecturas?, voy bien, Alba, terminé el increíble Palahniuk, con esa niña haciendo estragos en el infierno y para finales de mes tenemos que tener leído a  Richard Yates y sus "Once maneras de sentirse solo" pues yo también terminé con Zafón, aunque aún me queda el tercer tomo de la famosa trilogía del Cementerio de los Libros Olvidados, eso es otra cosa, Alba, es que el autor norteamericano es tan tremendista que lo elevas a los altares o lo quemas en…, ¡¡en el infierno!!, ¡ja, ja!, ibas a decir en el infierno, Gon, como la niña, ¡ja, ja!...