Jóvenes con derecho a divertirse; adultos con derecho al descanso nocturno...la eterna disputa que corre como reguero por la mayoría de los municipios, sin que se consiga un acuerdo que satisfaga a unos y otros. A Pedro lo llevan por primera vez a una botellona: es lógico tiene que experimentar para saber en qué consiste eso; se encuentra con alguien que no teme a nada, Serrano, para el que pasarlo bien está por encima de cualquier otra consideración. Y por último está Juan Carrasco, tío de Pedro, que quiere coger al toro por los cuernos y acabar por las bravas con lo que la municipalidad no puede. Estalla el conflicto, y siempre hay un inocente que paga las consecuencias. Ahí está el relato, ahí el destierro.
Hola Arruillo! Cuanta razón tienes, me apena ver tanta irresponsabilidad, no se como vamos a acabar con los rebrotes que se están originando. Cuídate y felices vacaciones.
ResponderEliminarAbrazos.
Hola, Conchi. Aunque se trata de un relato de antes del confinameinto, viene muy a cuento de la situación actual. Cuídate tu también. Buen verano. Un abrazo
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