

132 Gon, ya he visto Ágora, ¿y qué te ha parecido?, si quieres que te diga la verdad no me ha convencido del todo, me esperaba más, eso suele ocurrir cuando se crean muchas expectativas sobre una película, la historia es interesante, pero los supuestos efectos especiales de las grandes superproducciones, que quieres que te diga Gon, no me han sorprendido ni me ha hecho estremecer, otra vez será Alba, a mí por el contrario me causó una buenísima impresión “Amanece que no es poco”, que la vi en la tele, ¡qué bien me lo pasé!, pero eso no es ningún estreno, para mí si Alba, es que no la había visto, es que no tiene nada que ver una cosa con la otra, son películas ¿no?, vamos a dejarlo Gon que estamos desvariando, te voy a llevar ahora a la poesía, ¡vaya cambio!, tengo dos cosas que decirte al respecto, por una parte, hablarte de Neruda del que he terminado de leer “Navegaciones y regresos”, ¿y qué?, ¿cómo que y qué?, que qué te ha parecido, pues que es un libro más donde el poeta le canta a todo lo que se mueve y no se mueve, ¿y se entiende?, ¡claro Gon! A Neruda se le entiende todo, tanto es así que tuvo sus más y sus menos con Juan Ramón Jiménez por esas ligerezas, a mí este libro me ha encantado, hay que meterse en su ritmo, en sus odas, en su forma de componer en definitiva, pero una vez que lo consigues, es para disfrutarlo, si tú lo dices, lo digo y te lo recomiendo Gon, no sé ¿y lo segundo?, lo segundo es preguntarte qué te pareció la lectura que nos hizo Onofre la semana pasada, ¡una maravilla!, y que bien ese Premio que ha conseguido en Alicante, para eso tiene una mano divina, unos versos exquisitos diría yo Alba, hasta me emocionan a mí, que ya sabes…si, sí ya sé, no es tu fuerte, por cierto tenemos que llamarlo a ver cómo le ha ido en la recogida del premio, lo llamaremos Alba, hay que cuidar las buenas amistades, me voy, adiós Gon hasta más tarde.
129 Te noto algo eufórico esta mañana Gon, como no voy a estarlo luego del día de impresiones ópticas que tuve en el día de ayer, ¿dónde estuviste?, por la sierra, eso ya me lo imagino, puedes ser algo más explícito, por la sierra de Aracena: ¡que maravilla Alba! ¡qué coloridos!, cuanto gozo da andar por esos senderos llenos de hojas de castaño, degustando madroños, castañas, membrillos, manzanas silvestres, bellotas y recogiendo algunos gallipiernos, ahora ya me lo explico, a ver cuando te animas, es que tengo mucha faena Gon, ¡anda ya! hay que desenchufarse un poco para que las ideas fluyan desahogadas, de lo contrario no salimos de los atascos, tienes razón Gon tendré que plantearme algunas cosas, ¿y qué has estado haciendo?, entre otras cosas enviando a Doña Concha a probar fortuna por esos mundos de Dios, ¡Ah Doña Concha, qué bien nos lo hemos pasado en su elaboración, eh!, ¡ya! Pero ahora es tiempo de que ella misma juegue sus bazas, ya veremos que noticias nos depara, además Gon y esto te va a afectar a ti, el jefe pretende que continuemos la saga de cartas a opá, ¿no me digas?, te digo: por lo que se ve hay demanda, así que ya sabes, hay que narrar y para eso tú eres el más indicado, ya veo, ya, y además tenemos que seguirle la pista a esas entrevistas con los representantes policiales y políticos, además, eso es Gon tendremos que decirle algo a Fernando y Delfos que nos visitaron últimamente, ¿Qué más Alba?, hay que enterarse que está pasando con…¡Espera, espera, espera!, será mejor que vayamos a tomar café y a la vuelta me cuentas el resto, déjame que saboree un poco más los placeres otoñales de
128 Dice el jefe que hoy toca poesía, así que ahí les dejo el poema que justifica el título de la colección Reloj de Arena…
SI LAS ARENAS DEL RELOJ
Si las arenas del reloj
fuesen de distinto calibre
podría dar cobijo
-en mi tiempo -
a más besos de primavera.
Si el corazón que grabaste
fuese sobre fondo de roble
en lugar de espigado eucalipto
aún podríamos admirarlo.
Si la llave de mi carne
cayó en oscuro laberinto
¿a qué cerrajero de guardia
podremos pedir ayuda?.
He de taparme la boca.
No quiero seguir devorando
ansias de amar
sin sentido.
Aunque los labios no quemen.
Aunque los ojos no brillen,
Aunque la desnudez sea natural,
no puede ser espejismo. No cogí
las arenas del tórrido desierto
sino de una inmensa playa
-casi dormida-
que jugaba
con el dios Sol a construir
globos aerostáticos.
Y parece que fue ayer cuando unas pocas gentes con dinero veraneaban en San Sebastián. Cambiar de cutis está hoy por hoy al alcance de casi todos. ¿Habrá que esperar a la muerte de Fidel para desentrañar el misterio cubano? ?O nos quedaremos sin enterarnos?. Aquí junto al cementerio también se recuerda a Bécquer y su estremecedora leyenda, aunque conviviendo con la muerte parece que da hasta menos miedo. El sonido del silencio, cuesta descubrirlo, se vende tan caro que hay quien le asusta su presencia. Volvieron a caer bombas USA en la herida del Golfo. Cada día que pasa las Naciones Unidas tienen un grado menos de tranquilidad. Y el resto de los mortales también. Hoy es martes, habrá que echar la primitiva ¿qué remedio?
126 ¿Qué tal D. José cómo fue todo?, muy bien, muy bien, Nerea estuvo muy en su papel y tan sólo lloró cuando le cayó aquello chorreón de agua en la cabeza, no sería tanto D. José, no crea Gon que el cura también metido en su papel se le fue un tanto la mano y la criatura no tuvo más remedio que protestar, ¿y la ceremonia fue bonita?, si Alba, sencilla, con poquita gente pero con ese sabor de relajante paz que transmite el templo, y el lugar D. José que esas iglesias de los pueblos siempre tienen algo que las hace distinta, pues no vea lo contenta que se va a poner Izaskun, ¿Izaskun y esa quien es?, una amiga nuestra D. José, ¿y qué tiene que ver con mi nieta?, no, nada que como la conocemos le hablamos un día de ella y…¡no le habrán dado ninguna foto, que ya saben como es esto de interné!, que va, que va, no se preocupe D. José, lo que Gon quiere decir es que un día charlando…eso charlando, espero que mi nieta no esté en boca de nadie como si fuese una cosa noticiable, ¡que no D. José! Lo que Gon, ¡sé lo que Gon quiere decir Alba!, no me lo repita más, les dejo que tengo mucho que hacer.
¡Qué mosqueo!, menos mal que era un tema agradable, si llegamos a plantearle una revisión salarial o algo por el estilo ¿qué nos hubiera hecho?, déjalo Gon no te esfuerces, es que es lunes, pongámonos a la tarea: Fernando, muchas gracias por tus calurosos comentarios, tanto a Gon como a mí nos agrada que haya alguien que le guste lo que hacemos, a mí más Alba, pero ¿qué pretendes, que sigamos de lunes?, ¡anda deja ya el café y al ponte teclado, que esto parece que está desvariando!
125 Por fin nos va a sacar Gon de la duda en la que nos tiene metida con la situación de ese personaje tan curioso…¡chiiiiisss!, no digas más, ¡ah, de acuerdo, me callo!
CONTENEDORES (Y 3)
.../...Viene de Contenedores (2)
Se hizo la noche y allí seguía, sintió como si llamasen a la tapa-puerta y con toda la familiaridad de la que era capaz, como si se tratase de la puerta de su chabola, levantó un poco la portezuela y se introdujo en ella una bolsa que colgaba de unos dedos. Como veía que no acababa de caer la bolsa, la sujetó con una de sus manos, mientras que con la otra sostenía la tapa, entonces los dedos cedieron en la pinza que ejercían sobre la bolsa y se esfumaron. Ni dio las gracias. Pasó directamente a la inspección ocular del contenido de la bolsa porque oler, olía bien y estaba hasta calentita, así que no era cosa de perder el tiempo no fuera a ser que se enfriara. Se acomodó, extrajo el contenido y se le pusieron los ojos a cuadritos, cuando vio aquella apetitosa pizza que tan sólo conocía de la propaganda que encontraba entre los cartones, con el queso fundido chorreando por sus bordes y los trocitos de bacón incrustados en la masa; le lanzó dos primeros mordiscos que se manchó hasta las orejas, luego mientras engullía tanteó la bolsa y se dio cuenta que había algo más: una cosa como cilíndrica, que no estaba caliente. “Anda la leche”, una lata de cerveza que no estaba vacía; tiró de la anilla con tanto ímpetu que salió el espumoso líquido buscando aire libre y le dio una ducha con olor a cebada.
No había hecho más que expeler el tercer eructo cuando de nuevo sintió que alguien merodeaba por los alrededores. Se encogió y permaneció en silencio. En vista de cómo iba la jornada lo mejor era relajarse y esperar acontecimientos. De nuevo una mano que asoma, una bolsa que cuelga y los ojos del Marué que no se lo creen. Un ligero balanceo de la bolsa le hacen sospechar que o la coge o se puede llevar allí bailando toda la noche, así que estira su brazo y se apodera de ella. Al cogerla, con sus dedos roza los dedos que sujetan la bolsa y experimenta una sensación placentera que le hace chiribitas en la boca del estómago; quiere dar el paso de asomarse a ver de quien se trata, pero le falta ese último impulso y los pasos suenan a retirada, así que se deja llevar por los instintos, vuelve al rincón y al desabrochar la bolsa se encuentra con un apetitoso pastel de manzana al que no le ganan ni los del escaparate de
El peso de la noche cayó sobre la ciudad y los operarios del servicio de recogida de basura comenzaron a desplegarse con sus enormes vehículos articulados, cómodamente instalados en la cabina de los camiones. Por eso al llegar el turno de recoger el contenedor en el que se hallaba el Marué, nadie oyó sus gritos tratando de salir del mismo, peleándose con la trampa-puerta allá en lo alto como si estuviese en los cacharritos de la calle del Infierno. Por el barrio donde vivía imperaba la miseria y nadie lo echó en falta, ni siquiera su madre-abuela que bastante tenía con sobrevivir evitando, que ningún indeseable se le instalara en la chabola, aunque dicen por otros sectores de la ciudad, que ese muchacho que pasea del brazo de
123 Da alegría sentir como hay gente que sigue luchando por abrirse hueco en este complicado mundo de la literatura, ¿verdad Gon?, y que lo digas Alba, supongo que te referirás a Delfos que anduvo por aquí recientemente haciéndonos una visita, por él y por tantos otros que ahí siguen al pie de cañón, ¿y que le decimos a Izaskun?, pues lo mismo que a Miguel Angel: en Lumbreras 12-9 tienen su casa abierta todos los miércoles a las 18h para que nos castiguemos con esos textos difíciles y disfrutemos con esos otros que nos hacen pasar un buen rato, ¿y tú crees que el jefe?, del jefe no te preocupes Gon, que bastante tiene con los preparativos del bautizo, mientras que nosotros sigamos colgando sus encargos en las fechas adecuadas, no se va a preocupar de otra cosa, por cierto Gon, lo que tenemos abandonado es el ritmo de visitas a nuestros vecinos de comunidad, ¿y que le vamos a hacer? Ya me gustaría a mí poder leer todas sus entradas, pero es que no damos abasto, en eso tienes razón Gon porque a mí con las lecturas pendientes en papel me basta y me sobra, pero ya sabes, el je…¡de acuerdo! No lo repitas Alba, haremos lo que podamos, pero me temo que tendrá que ampliar la plantilla si quiere que esta empresa rinda más, ¡Huiiii, eso si que es difícil, con lo rácano que es, para rácano el clima Gon, ¿tú crees que tendremos otoño este año? ¿será esto el cambio climático?, no sé, no sé me da la impresión que los asuntos de la sin par Madre Tierra van por otros derroteros muy distintos a los cálculos de los humanos, ¡qué calor en la playa Gon!, ya te digo, está bien, dejemos los asuntos terrenales y vámonos con los espirituales: al tajo.