lunes, 23 de febrero de 2009

Las amistades

25 ¡Óyeme Gon! Como sé que has estado un tanto ocupado en el último mes, te voy a poner al día en algunas cosas: parece que ya no estamos solos en el inmueble, por aquí se asoma Lilia, que desde San Juan (Argentina) nos ofrece su amistad, al margen de unos magníficos poemas que adornan las paredes de su casa, donde es todo un placer pasearse de vez en cuando; luego está Inma, que la tenemos aquí más cerquita, en Sevilla, pero que ya tiene una larga andadura en este sitio y que se nota nada más cruzar el umbral de su casa; nos deja una muestra de lo que lleva dentro en distintas facetas, que las expresa la mayoría de las veces en prosa, y que se le nota muchas ganas de comerse el mundo; y por último, Gon, tuvimos el otro día una visita inesperada, porque de forma curiosa se interesó más por la caligrafía del jefe que por nuestro trabajo, ¿Y cómo se llama?, se llama Mita y tiene una casa muy chula y nos visita desde Alemania, no la conocemos aún muy bien, pero parece que le va lo multicultural y tiene muchas amistades, ¡pues que bien, Alba!, ya veo que no pierdes el tiempo, no te preocupes que no tardaré en ponerme al día, ¡claro ahora que terminaron los Carnavales!, aún no terminaron para mi, Alba, pero podemos decir que lo que me queda es ya más relajado, ¿y no me vas a contar algo más detallada tu experiencia? Hoy no, Alba, mejor la próxima entrada, que estoy aún muy cansado, ¡de acuerdo, espero tu crónica!, no te fallaré, Alba, no te fallaré.

1 comentario:

  1. Bonito gesto, Arruillo, por mencionarme
    en su texto, un abrazo desde San Juan,
    Lilia

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¿Y ahora qué? ¿No me vas a decir nada?